Eversys ha presentado su nueva línea de cafeteras que suponen una renovación completa, por dentro y por fuera, de sus tradicionales E'Line, con las que irrumpieron en el mercado en 2009. Hoy, un año después de celebrar su décimo aniversario y haberse convertido en el principal referente del mercado en su sector, avanza un paso más en su objetivo por neutralizar la distancia que separa a las cafeteras tradicionales de las superautomáticas en cuestiones de calidad de extracción del café espresso.
"En Eversys hemos sabido detectar la evolución del mercado y creemos firmemente que Enigma reúne todas las cualidades de la próxima generación de cafeteras y que engloba toda nuestra experiencia acumulada en estos últimos diez años", explica el director comercial de la firma, Kamal Bengougam desde la recién inaugurada fábrica de producción, en la localidad alpina de Sierre.
Referente máximo del mercado en términos de diseño e innovación tecnológica, Eversys es reconocida ya como el Ferrari de las cafeteras a pesar de su corta edad. "El cliente hoy demanda una máquina que pueda personalizar a su gusto, que se presente al público como un elemento principal en el escenario de su establecimiento, que sea multidisciplinar y potente", añade Bengougam. "Existe, por tanto, una preocupación creciente por la estética y la experiencia sensorial del consumidor que afecta también a las superautomáticas y que nos conduce a la siguiente fase, que hemos nosotros hemos llamado 'super tradicional' y que demuestra una vez más la apuesta de Eversys por la innovación".
El obvio lavado de cara de la clásica E'line incluye en su parte externa nuevos displays un 27% más grandes (25,6 cm.), con mayor resolución y con la posibilidad de emitir vídeos gracias a un procesador Linux de mayor potencia. Destaca también un aumento considerable en el uso de metales –hasta un 90% del conjunto, en palabras del jefe de Diseño de la firma, Alexandre Rossier– en la nueva armadura para cumplir con el compromiso de acercarse al máximo a una cafetera tradicional.
Los grupos han sido completamente rediseñados sin plásticos, y tanto la bandeja superior como la de desagüe se han fabricado en acero inoxidable. Además, los paneles laterales se presentan ahora con dos opciones: Tempest, en aluminio natural, y Earth, en cobre. Características todas que nos remiten a los diseños y calidades de su modelo más joven y revolucionario con el que han conquistado buena parte del mercado, incluso el de las cafeterías de especialidad. Hablamos, claro, de la Cameo.
El hecho de producir una máquina con componentes metálicos en casi su totalidad aumenta considerablemente su longevidad, a la vez que hace de ella un producto mucho más respetuoso con el medioambiente y que, sobre todo, mejora la experiencia de los clientes gracias a una mayor estabilidad térmica, aportando así la consistencia imprescindible para replicar los resultados deseados en la taza.
En cuanto las innovaciones técnicas, la nueva Enigma incluye también buena parte de las funciones desarrolladas para la Cameo, principalmente la tecnología para producir de manera automática texturas de leche completamente personalizadas para cada bebida, que ahora se controlan electrónicamente de manera sencilla e intuitiva; la posibilidad de trabajar con dos tipos de leche diferente y la inclusión opcional de la función 1.5 step para un latte art consistente y eficiente. Además, el modelo incluye de serie el sistema e'Levelling que mejora la distribución de la pastilla de café antes del prensado para obtener una extracción más uniforme.
La nueva Enigma se presenta por ahora en dos versiones: una con dos grupos para jubilar a la antigua E'4, y la Shotmaster, un modelo compacto también de dos grupos diseñado originalmente para oficinas y espacios reducidos sin caldera de vapor ni sistema de leche y con bomba externa. Su nueva versión, aún por descubrir, sí incluye algún sistema de vaporización y de leche, pues se ofrece con la posibilidad de incluir la opción 1.5 step.
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